Esta pequeña villa marinera dispone de puerto y lonja donde uno puede ir a ver el trajín de la vida diaria en una localidad que vive de la pesca. Para conocer más a fondo su actividad marinera, recomendamos las rutas guiadas del puerto de Lira y alrededores, que organiza la Cofradía de Pescadores de Lira.
La misma entidad gestiona el Museo del Mar, otra parada interesante del pueblo junto a dos iglesias del siglo XVIII, sin olvidar las playas de Mar de Lira, Gabota, Porto das Barcas y Tras da Punta.
Como curiosidad decir que el hórreo de Lira y el hórreo de Carnota compiten en dimensiones y monumentalidad, aunque el de Lira está considerado como el más grande de toda Galicia. La fecha de ambas construcciones (1779 / 1814) parece indicar la existencia de la rivalidad entre las dos parroquias desde hace siglos.