A esta playa llegan surfistas de todo el mundo porque está reconocida en los cinco continentes con más de un cuarto de siglo en el circuito mundial de surf. En sus límites se celebran pruebas del Campeonato Mundial de Surf.
Vientos constantes y fuerte oleaje vuelven a marcar el carácter de la playa, una de las imprescindibles de este recorrido. Cuenta con merendero, chiringuitos, área de caravanas y todo tipo de servivios.
A mayores de su interés deportivos, el paisaje es brutal con un río que llega hasta el mar bordeando la arena blanca y fina, donde las familias suelen instalar el campamento por ser la zona más tranquila para el baño de los más pequeños.