A pesar de ser un paraje idóneo para este mamífero hacía más de un siglo que no se veía un ejemplar de oso pardo europeo. Gracias a las las cámaras trampa de la película se registran imágenes en diversas localizaciones y en diferentes momentos.
Un ejemplar macho de entre 3 y 5 años que parece estar pasando el invierno en estos parajes montañosos. Se cree que pudo llegar desde la zona occidental de la sierra de O Courel, un dato relevante para conocer la evolución de las poblaciones.
Estos parajes son hábitat para lobos, jabalíes, corzos, cabras, martas o ciervos, y también para este oso pardo al que no le gusta demasiado dejarse ver.