En cuanto a la temperatura del agua para bucear, existen diferentes trajes para adaptarse a cada medio. En nuestro caso, hemos buceado siempre en aguas tropicales, ya sea en Asia, África, Centroamérica o Sudamérica. Siempre hemos usado traje húmedo corto o largo. De todos modos, las características de los trajes secos o semisecos, os las enseñarán durante las lecciones teóricas del Open Water.
En aguas próximas al
Ecuador, la temperatura del agua rondan los 28/30 grados, lo que podemos denominar ‘caliente’, o por lo menos para una gallega friolera. A pesar de eso, cuando llevas tres o cuatro inmersiones de 45 minutos, acabas cogiendo algo de fresco. Por eso algunos buceadores usan
chalecos calefactores o camisetas ‘ad hoc’ bajo el traje. Eso dependerá de cada cuerpo, te irás conociendo a medida que bucees.
En España hemos buceado en algunos de los sitios más cálidos del país, como
Tenerife o
Menorca. En el primero la temperatura rondaba los 21/23 y en las Baleares en verano agradecimos los 26/27 grados. Tengo que decir que mi sensación térmica era distinta que buceando en el trópico, porque 3/4 grados más pueden marcar la diferencia, sobre todo si realizas varias inmersiones seguidas. Si el sol pega fuerte y te secas bien, el termostato regula. Si te quedas húmedo, después de un par de buceos puedes sentir cierto frío.
Si aconsejamos llevar siempre en tu bolsa waterproof otra muda de ropa para cambiarte al terminar el Fun Dive y no enfriarte en el trayecto de vuelta en el barco. No viene mal una sudadera o chuvasquero porque cerca del Ecuador, el clima es muy variable y un día de sol se puede volver tormentoso en poco tiempo.
No es la primera vez que tengo que dejarle la sudadera a otra buceadora, la toalla a su amiga y yo ponerme mi muda. En Panamá cayó una tormenta importante cuando estábamos en busca de ballenas y la gente acabó con frío. Llevad algo impermeable y plegable, que puede ser muy útil para estos casos.
Te contamos más cosas en el apartado LOS ESENCIALES DEL (VIAJERO) BUCEADOR.