Leyenda de Santa Mariña
No se puede hablar de Aguas Santas sin mencionar la leyenda de Santa Mariña. Cuenta que el romano Olibrio se enamoró perdidamente de una huérfana pastora llamada Mariña.
Ante la resistencia de la joven a abandonar la doctrina cristiana, padeció numerosos martirios infructuosos, porque a los tres días se curaba de todas esas torturas.
La encerraron, la intentaron ahogar en un estanque y finalmente la quisieron quemar en un horno pero fue salvada a tiempo por San Pedro, quien logró refrescarla en una fuente cercana.
Acabó decapitada, pero su cabeza rebotó tres veces en el suelo donde brotaron tres manantiales de aguas cristalinas que conservan augas milagrosas según la tradición popular.