¿Astronauta o senderista?
Caminando entre paisajes marcianos e insólitos
- 1. ¿Astronauta o senderista?
- 2. Datos técnicos y consejos
- 3. Transporte para la ruta
- 4. Historia geológica
- 5. Parque Natural de Cumbre Vieja
- 6. Centro de visitantes
- 7. Volcán San Antonio
- 8. Volcán Teneguía
- 9. Últimas erupciones
- 10. Faro de Fuencaliente
- 11. Salinas de Fuencaliente
- 12. Flora y fauna endémica
- 13. Dónde comer y dormir
1. RUTA DE LOS VOLCANES
Durante el viaje hemos tenido una duda… ¿somos senderistas o astronautas? Porque así nos hemos sentido en La Palma, pisando la tierra de la Ruta de los Volcanes, o tocando las nubes en el Roque de los Muchachos. Una experiencia única y al alcance de todos, en las islas Canarias.
Una de las experiencias imprescindibles de la isla pasa por recorrer los paisajes marcianos y desoladores que ofrece la conocida como Ruta de los Volcanes, que discurre desde el Refugio del Pilar hasta el Faro de Fuencaliente. Más de 20 kms de parajes que parecen sacados de otro planeta, donde la tierra se convierte en carbón y las montañas se transforman en monstruos petrificados de lava del interior de La Tierra.
La vegetación se transforma según avanzas en el trayecto y las tonalidades de colores que ofrece la geología volcánica son sorprendentes. Lejos de brindar parajes monótonos, ofrece postales insólitas y magnéticas, generadas por unas condiciones climáticas de lo más singular. Recuerda que es una de las islas más jóvenes del archipiélago canario, con un terreno todavía muy salvaje y abrupto.
Si te interesa conocer algo más sobre la vulcanología de la isla, puedes acercarte al Centro de Visitantes del Volcán de San Antonio, además de poder bordear el cráter del volcán San Antonio a pie y divisar una panorámica excelente del volcán de Teneguía hasta el faro de Fuencaliente.
El itinerario se puede dividir en dos partes realizando el primer tramo desde el Refugio del Pilar hasta Los Canarios, y el segundo tramo desde cualquiera de esos puntos al Faro de Fuencaliente. Repartes así la caminata en dos jornadas. La ruta completa desde el Refugio del Pilar al faro de Fuencaliente es de unos 24 kms.
Si decides hacer solamente la ruta de 19 kms entre el Refugio del Pilar hasta Los Canarios, te quedarás sin admirar algunos de los tesoros naturales volcánicos de La Palma, como el volcán San Antonio que lleva 4 siglos apagado, el Teneguía que ha erupcionado apenas hace 50 años, y el Faro de Fuencaliente y las salinas, un sitio de interés científico que acoge también el Centro de In. Si dispones de dos días, lo recomendable es partirla en dos tramos como te hemos explicado.
La ruta no es circular. Si dejas el coche aparcado en el Refugio del Pilar, al llegar al faro de Fuencaliente tendrás que coger un taxi o un autobús para volver al punto de partida. Lo mismo si finalizas en Los Canarios. Esta ruta atraviesa varios espacios naturales protegidos.
NO TE LO PIERDAS
Una de las actividades que recomendamos es realizar una ruta de senderismo guiada por el volcán de Cumbre Vieja que entró en erupción en el año 2021. Duración: 2,30h.
La Ruta de los Volcanes es uno de los senderos más populares de la isla, y por tanto de los más concurridos. El recorrido tiene una línea descendente, aunque en su primera parte supera un importante desnivel. Durante la travesía, podrás divisar las islas de Tenerife, La Gomera y El Hierro, con permiso de la niebla y las nubes. Estad atentos al suelo, pero también al cielo. Como haría un astronauta pisando Marte o La Luna.
La ruta se puede realizar por libre y está muy bien señalizada pero si lo prefieres puedes reservar este tour que recorre el tramo desde el Refugio del Pilar hasta los Canarios. Son más de 9 horas y unos 17 kms de recorrido sin desperdicio.
2. DATOS TÉCNICOS
DISTANCIA. La ruta de los volcanes completa recorre casi 24 kms (Refugio del Pilar al Faro de Fuencaliente). Recuerda que la puedes realizar en dos partes, el primer tramo sería hasta Los Canarios (unos 18/19 kms). Partirlo en dos, es lo recomendable si no estás en plena forma física.
NOMBRE OFICIAL DE LA RUTA. La Ruta de los Volcanes discurre por el sendero de Gran Recorrido GR-131 Etapa 3.
DIFICULTAD. El usuario debe valorar su estado físico a la hora de hacer la ruta, y tener en cuenta que el calor, la falta de agua y el viento pueden provocar deshidratación en verano. En invierno puede llegar a hacer frío, conviene llevar ropa adecuada para los contrastes de temperatura. El recorrido tiene una tónica descendente, aunque en su primera parte supera un importante desnivel.
ESPACIOS NATURALES PROTEGIDOS. Parque Natural de Cumbre Vieja. Monumento Natural de Los Volcanes de Teneguía. Sitio de Interés Científico de Las Salinas de Fuencaliente.
ÉPOCA RECOMENDADA. Cualquier época del año, aunque se recomienda evitar los días más calurosos del verano.
TRANSPORTE HASTA EL SENDERO. No es ruta circular. Es necesario contar con un vehículo de apoyo o contratar los servicios de un taxi. Desde Fuencaliente no hay autobús directo a Los Cancajos, tienes que hacer trasbordo en Los Canarios (año 2020).
RECOMENDACIONES BÁSICAS
Consultar partes metereológicos antes de emprender la marcha.
No olvidar los clásicos básicos: gorro, crema solar y gafas de sol.
Teléfono móvil con la batería cargada, para cualquier emergencia.
Llevar algo de ropa de abrigo, un chubasquero, comida y agua abundante.
Equiparse con botas de trekking o similares.
El suelo volcánico es muy sensible a la erosión, conviene ir con cuidado.
No salirse de los caminos marcados, es una norma básica.
En la cumbre del Teneguía los vientos pueden soplar con fuerza.
3. TRANSPORTE PARA LA RUTA LINEAL
La ruta completa empieza en el Refugio del Pilar, en el municipio de El Paso, y termina en su homólogo de Fuencaliente, a orillas del Atlántico y con el faro como punto guía durante la última etapa desde Los Canarios. Como el itinerario es lineal, deberás apoyarte en un transporte para volver al punto de partida.
Ruta Refugio del Pilar – Faro de Fuencaliente. Recuerda que desde Fuencaliente no hay autobús directo a Los Cancajos, debes ir primero hasta la localidad de Los Canarios. La otra opción es negociar un taxi para volver al Refugio del Pilar donde habrás estacionado tu coche por la mañana. En cambio si estás alojado en el sur, te compensa hacer al revés, ir en autobús/taxi al Refugio del Pilar porque así cuando llegues a Fuencaliente, estarás cerca del alojamiento.
Etapa Refugio del Pilar – Los Canarios. Por la mañana podrás dejar tu coche en la localidad de los Canarios, y tomar un autobús o taxi para trasladarte al inicio de la ruta, situada en el Refugio del Pilar. Cuando hayas terminado el tramo, tendrás tu coche disponible para volver a tu alojamiento.
Etapa Los Canarios – Faro de Fuencaliente. Por la mañana podrás dejar tu coche cercano al aparcamiento del centro de visitantes del volcán de San Antonio, y cuando hayas terminado la ruta, tomar el autobús directo que te lleva de vuelta a Los Canarios. Para muy cerca del centro de visitantes.
4. HISTORIA GEOLÓGICA DE LA RUTA DE LOS VOLCANES
El origen y la evolución de la isla bonita no se puede explicar sin hablar de su actividad volcánica. Su tesoros volcánicos y hábitats singulares la han distinguido como Reserva de la Biosfera.
Las erupciones más recientes datan de 500/600 años. Se llaman ‘históricas’ porque están documentadas. La mayor parte de estos volcanes se alinean en la dorsal de Cumbre Vieja, por donde transcurre esta ruta.
* CRONOLOGÍA *
- Volcán Tajuya: año 1585
- Volcán Martín: año 1646
- Volcán San Antonio: año 1677
- Volcán El Charco: año 1712
- Volcán San Juan: 24 de junio de 1949
- Volcán Teneguía: año 1971
5. PARQUE NATURAL DE CUMBRE VIEJA
El punto de partida del Refugio del Pilar se encuentra enmarcado en el Parque Natural de Cumbre Vieja que abarca todo el centro-sur de la isla extendiéndose por 6 municipios: Breña Alta, Breña Baja, Mazo, El Paso y Fuencaliente. Es atravesado de norte a sur por este sendero conocido como Ruta de los Volcanes, y discurre por todos los conos formados por las erupciones volcánicas. Las vistas impresionantes alcanzan, con cielos despejados, las otras islas vecinas.
El parque fue creado para preservar los conos y coladas volcánicas de las diferentes erupciones del volcán de Cumbre Vieja. Conviene aclarar, que aunque a cada cono se le denomine volcán, en realidad todos forman parte del mismo. Desde las prehistóricas hasta las últimas del Volcán Teneguía del año 1971, la más reciente de toda la Península.
Los caminos son serpenteantes durante todo el itinerario, mientras se suceden diferentes volcanes que regalan toda una historia de geología. Un pasado cargado de energía que todavía pervive en cada piedra que nos rodea durante el recorrido. La Ruta de los Volcanes desprende auténtico magnetismo de principio a fin. El poder hacerla solos, fue un lujo impagable en los tiempos que corren.
Completamente desierta, su misticismo consiguió atraparnos.
Incialmente el parque fue creado como dos espacios separados: el Parque Natural de Cumbre Vieja y Teneguía, junto al Paraje Natural de las Coladas del Volcán de Martín. Posteriormente fueron unidos conformando toda un área protegida.
Este terreno es zona de sensibilidad ecológica, y la parte norte pertenece al área de protección de la antesala del Parque nacional de la Caldera de Taburiente. En una isla que presume de ser Reserva de Biosfera de cabo a rabo, cualquier rincón es meritorio para protegerse adecuadamente. Dentro del Parque también hay grandes pinares canarios y laurisilva.
La vegetación es asombrosa, porque lejos de ser monótona, nos pareció de lo más interesante. Terreno oscuro que recuerda a tierras poco fértiles, pero donde la naturaleza encuentra muchas razones para desprender sus alas de color. De repente brota un árbol en medio de un paisaje marciano y completa el cuadro. Postales extraterrestres.
Se pueden ver comunidades de pino canario y, en menor proporción, de laurisilva y matorrales característicos de este tipo de cumbres. Las panorámicas de grava junto al pino canario quemado que renace de sus cenizas, son brutales. Sólo se quema la corteza y luego vuelve a brotar en medio de ese paraje insólito. El ciclo de la naturaleza en modo bucle. Al final, el verde siempre acaba por inponerse.
No faltan los cactus en toda su diversidad, y otras especies vegetales que parecen nacer aleatoriamente en medio de campos de arena gris o en medio de la grava y las rocas volcánicas. Estampas tan extravagantes como elegantes, dignas de la mejor fiesta de etiqueta. Paisajes de fantasías propias de Tim Burton.
Son muy curiosos los parajes planetarios que ofrecen los campos de lapilli y lavas, que no son más que piedras de diferentes tamaños, colores y formas que conforman el fondo de muchos paisajes de la ruta. Pero al fin y al cabo, parte de las entrañas de La Tierra.
Colores rosados o anaranjados sobre fondos gris marengo, o granates sobre gris ceniza. Panorámicas que nos siguen pareciendo de lo más extraordinario y salvaje, por mucho que avancemos en la Ruta de los Volcanes. Conexión La Palma.
CURIOSIDADES: EL LAPILLI
El lapilli viene del latín y significa ‘pequeñas piedras’. Es un término de clasificación de la tefra según su tamaño. Está constituido por fragmentos piroclásticos, expulsados por un volcán durante una erupción. Su diámetro es variable 2/64 mm. En las islas Canarias este tipo de agrupaciones de pequeñas piedras recibe el nombre de ‘picón’.
Aunque el desnivel de subida del itinerario no es muy alto, casi 700 metros, el de bajada es de nada menos de 2.100 metros. Las piernas y sobre todo las rodillas sufren bastante, ya que hablamos de 6 a 8 horas para completarla entera. El camino no tiene pérdida y sin GPS se puede hacer sin problema. Está muy bien indicado con continuos y letreros que señalan la distancia hasta Los Canarios o el Faro de Fuencaliente.
Una vez en el Refugio el Pilar, con área de picnic, hay numerosas indicaciones y un puesto forestal que indica el inicio de la ruta. Lo primero será atravesar un bosque de pino canario que va bordeando un antiguo cráter, hasta divisar el primer volcán del Hoyo Negro, con sus sinuosas formaciones de lava. Este cráter se puede observar desde el sendero que sigue subiendo durante kms hasta llegar a uno de los puntos más crítico: la cuesta de las Deseadas. Con este nombre, sobran las palabras.
La subida tiene mucha pendiente sobre un terreno arenoso y resbaladizo. Un dato importante es que en esta parte de la ruta no hay sombra y cuando llevas un par de horas caminando cuesta arriba se nota. Suma un sol potente a casi 2.000 metros de altitud. Durante la travesía se pasa por los cráteres del Duraznero y la Deseada hasta el que está próximo a los Canarios, el volcán San Martín.
La cordillera de Cumbre Vieja es una formación volcánica con elementos únicos como los roques de Jedey y de Niquiomo y el Pico Birigoyo. Esta cadena montañosa es representativa de la geología insular y la culpable de la mayor parte de los sucesos volcánicos de la isla. Desde los ocurridos en la antigüedad hasta la última erupción del Teneguía en el año 1971.
Una vez divises la panorámica del sur de la isla, comienza el acusado descenso. La pendiente es incluso mayor que en la parte anterior, por lo que hay que ir con cuidado y atento a donde uno pisa. Pero sin olvidarse del cielo, que nos ofrecerá perspectivas lejanas de islas como La Gomera o Tenerife, con el Teide coronando en los días despejados.
Una vez divises la panorámica del sur de la isla, comienza el acusado descenso. La pendiente es incluso mayor que en la parte anterior, por lo que hay que ir con cuidado y atento a donde uno pisa. Pero sin olvidarse del cielo, que nos ofrecerá perspectivas lejanas de islas como La Gomera o Tenerife, con el Teide coronando en los días despejados.
Y poco a poco, comienza a aproximarse en el horizonte la silueta del Teneguía, este pequeño infante en el reino de la lava. Desde ese momento, nuestra vista puesta en esa cima negra como el carbón. O eso nos parecía de lejos, porque de cerca, se transformó en una paleta de colores en roca, digna del mejor artista del Renacimiento.
Si al llegar a Los Canarios te ves con fuerzas puedes seguir y completar la ruta del tirón, calcula unos 7 kilómetros más de bajada. Lo más importante es recordar que desde Fuencaliente no hay autobús directo a Los Cancajos, debes ir primero hasta Los Canarios y hacer transbordo. Si estás cansado, recomendamos partirla en dos y realizar el segundo tramo en otra jornada.
A partir de ahora, comienza la etapa entre el volcán de San Antonio y el volcán Teneguía, para finalizar en las salinas del Faro de Fuencaliente.
6. CENTRO DE VISITANTES DEL VOLCÁN DE SAN ANTONIO
Existe un Centro de Visitantes con una pequeña sala expositiva que consiste en paneles informativos y alguna proyección en torno a la formación geológica de la isla y de todo el archipiélago canario. Una historia volcánica ligada a los terremotos, uno de los indicadores que persiguen los científicos para analizar los posibles temblores o erupciones próximas en el tiempo.
Un espacio que sirve de contexto para entrar en materia antes de recorrer los senderos. Un poco de aprendizaje general, que te coloca con los pies en una tierra plagada de enigmas y energía. Como curiosidad decir que en el exterior del recinto hay un simulador de un terremoto, para que puedas sentir un temblor en tu cuerpo. Si no habéis vivido ninguno, puede resultar interesante.
El pase te da la posibilidad de realizar una ruta circular sobre la cresta del volcán de San Antonio, producto de la reciente erupción del año 1677. La última ha sido protagonizada por su vecino el volcán Teneguía, con un aspecto más rudo y oscuro. Es la tierra más joven de España con apenas 50 años desde que ha salido de las entrañas de La Tierra.
La ruta se puede realizar por libre y está muy bien señalizada, pero si lo prefieres puedes reservar este tour que recorre el tramo desde el Refugio del Pilar hasta los Canarios. Son más de 9 horas y unos 17 kms de recorrido sin desperdicio.
CONSULTA LA RED DE SENDEROS LA PALMA
7. CRÁTER DEL VOLCÁN SAN ANTONIO
El Volcán de San Antonio surgió de la erupción del volcán de Cumbre Vieja en la isla de La Palma en el año 1677. Se crearon más de 16 pequeños conos y las coladas del volcán destruyeron el balneario de Fuente Santa. Actualmente sólo quedan las coladas del volcán y los conos más pequeños.
Este gran cono prehistórico de 720 metros es el resultado de una erupción que se encuentra protegido dentro del Monumento Natural de Los Volcanes de Teneguía. Esta distinción fue creada en el año 1987 dentro de una red de espacios protegidos de la comunidad canaria, agregando en 1994 el Parque Natural de Cumbre Vieja, con el objetivo de preservar los espectaculares conos y coladas de erupciones.
Entre ellas las del Volcán Teneguía y el Volcán de Fuencaliente, también conocido como el Volcán de San Antonio. El espacio natural es una importante muestra de biodiversidad en materia de ‘terrenos recién formados’, porque no es algo habitual en nuestro país. El parque cubre casi mil hectáreas de superficie.
En la foto superior veis la población de Los Canarios detrás del volcán y en la ladera el pueblo de Los Quemados. Y al fondo en verde, aparece el perfil del Parque Natural de Cumbre Vieja, que discurre haciendo de espina dorsal de la isla. La panorámica es impresionante. La proporción de las localidades al lado del San Antonio nos recuerda lo pequeños que somos si nos comparamos con estas obras consolidadas de la naturaleza.
Solamente podéis bordear el cráter del volcán San Antonio entrando al Centro de Visitantes, previo pago una entrada (6 euros – año 2020). El recorrido es corto pero ofrece diferentes perspectivas de toda la zona, además de poder pisar la cima de uno de los volcanes más recientes de nuestro país. Si no queréis entrar, tan sencillo como seguir el sendero GR-131 que evita este volcán dejándolo a mano izquierda. Un camino serpenteante desciende hacia una pista más ancha donde pronto divisarás el Teneguía.
Durante el recorrido por los senderos que rodean al San Antonio, la vegetación desértica nos apasiona. Allí donde el verde más se hace notar, sobre fondos oscuros que se mueven entre tonos marrones, grises y negros. Verdes casi fosforitos. Ese contraste de color es visualmente cautivador. El poder de adaptación de la naturaleza es increíble, ese que hemos mermado en nuestra especie, a pesar de ser animales supuestamente ‘inteligentes’. No olvidemos que esta isla es, al fin y al cabo, toda una Reserva de la Biosfera.
CURIOSIDADES – RESERVA DE LA BIOSFERA
Proyecto de la UNESCO (1971) para conciliar el progreso y el uso de los recursos naturales, potenciando el concepto de sostenibilidad.
Son lugares geográficos representativos de los diferentes hábitats del planeta, ecosistemas terrestres y marítimos.
Reconocidas internacionalmente, permanecen bajo la soberanía de sus países, y no están protegidas por tratados.
Un objetivo es la protección de la biodiversidad, pero también el desarrollo económico y humano de estas zonas.
La Red Mundial de Reservas de la Biosfera recibió el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia en 2001.
A fecha de 2019, existen 701 reservas de la biosfera en 124 países diferentes.
Desde el mirador del San Antonio, se consigue una buena panorámica del vecino volcán Teneguía hasta el faro de Fuencaliente, además de divisar los senderos, pistas y canalizaciones que se extienden por todo el Parque Natural. La altura máxima de esta cima es de 654 metros de altitud.
Te haces una idea de lo que será el trayecto entre Los Canarios y tu final de meta en las salinas de Fuencaliente, la perspectiva es muy buena para divisar tu ruta a vista de pájaro. Aquella punta del sur cubierta de blanco en un territorio dominado por el negro, será tu meta de destino. Luego te contaremos la mejor manera de ponerle el broche a final a la caminata. Un poco de sal para aderezar la caminata.
Se aprecia perfectamente el sendero que asciende a la cima del Teneguía. Ahí donde lo veis vestido de negro fúnebre, más cerca se convierte en una explosión de colores del centro de La Tierra. Marrones, rojizos, cobres, ocres, grises, amarillos, naranjas… un abanico de tonalidades en roca increíble. La naturaleza no deja de sorprender.
Durante el día el mirador del volcán San Antonio ofrece unas espectaculares vistas al cráter y a las laderas. Se pueden ver los extensos viñedos de Fuencaliente y la zigzagueante vereda que corona la cumbre del Teneguía. Por la noche, el espacio se convierte en una auténtica ventana al universo. El mirador astronómico del volcán de San Antonio se encuentra situado al sur de la zona de mayor nitidez para la observación de estrellas.
El diseño y la ubicación de este mirador de San Antonio, a 633 metros sobre el nivel del mar, permiten conocer el movimiento y la puesta del sol durante el ocaso, con la ayuda de unas estelas que marcan los cambios de estación. También dispone de un poste de sendero que señala hacia Polaris y un planisferio para ayudar a ubicar las constelaciones de la Osa Mayor y Casiopea.
Durante la primera etapa de la ruta entre Los Canarios y el faro de Fuencaliente, descenderás paralelo a las laderas occidentales de la isla que desembocan en el mar. El pinar se va transformando ladera abajo por las viñas que brotan del suelo volcánico, las uvas que darán lugar a los vinos de Fuencaliente.
Entre este paisaje distinguirás los núcleos urbanos de Los Quemados y las Indias, y ya más próximos al mar, los cultivos de plataneras que toman el relevo en este singular paisaje a los pies de los reyes territoriales supremos. Esas hilera de conos y cavidades volcánicas que conviene tener apaciguados.
8. VOLCÁN TENEGUÍA
PASARELA VOLCÁNICA: MODELO CASUAL MONTAÑA
(Teneguía: Marrón Chocolate)
En esta primera foto podéis apreciar un color marrón chocolate en la panorámica que nos deja el Teneguía a lo lejos. Quedaros con ella para comprobar cómo van cambiando los tonos a medida que nos aproximamos al cráter. Lo podréis comprobar conforme vayáis leyendo.
Una pasarela que terminará con un broche digno de un cotillón de fin de año: el Teneguía vestido de gala de rosa y plata, con toques de purpurina. Pero para decidirse por el modelo para la noche, antes hay que probarse unos cuantos trapitos. Pero no hagamos ‘spoilers’…!
No destaca por su altura, 439 metros sobre el nivel del mar, sino por haber sido el último en erupcionar sobre la plataforma terrestre hasta la erupción de Cumbre Vieja en el año 2021. Situado precisamente en el extremo meridional de la Cumbre Vieja, la erupción del Teneguía duró desde el 26 de octubre de 1971 hasta el 18 de noviembre de ese mismo año.
Las imágenes de un volcán disparando bocanadas de lava, es de lo más impresionante que se puede presenciar a nivel natural. No es de extrañar que se crease toda nueva atracción turística desde los años 70 que dio la vuelta al mundo.
PASARELA VOLCÁNICA: MODELO COCKTAIL
(Teneguía: Púrpura con brillos)
En el segundo pase del desfile que acoge el Monumento Natural de los Volcanes, el ojo puesto en el diseñador del Teneguía. En la foto superior comprobáis como cambia el estilo completamente, quitándose el vestido marrón chocolate por uno más vivo pero moderado. Tonos granates y vino, ideales para tomarse un cocktail cuando cae la noche. Un modelo donde ya se puede apreciar el gusto por los brillos. El terreno parece estar cubierto de una capa de púrpura brillante.
Esa última erupción volcánica en superficie de Canarias, cubrió de lava y gravilla volcánica buena parte del extremo sur de la isla de La Palma. Para preservar las vírgenes lavas del volcán Teneguía y las de su hermano mayor el volcán San Antonio, se declaró el Monumento Natural de los Volcanes del Teneguía.
El Teneguía estuvo estuvo escupiendo fuego y creando un cono de 90 metros, como si se tratase de un escultor moldeando su obra. Esa lava llegó a ocupar más de 3 millones de metros cuadrados de superficie, ganada incluso al mar. Terreno ocupado hoy por plataneras y malvasía, dos productos estandarte de la gastronomía y de la cultura palmera. De esto os hablamos más a fondo en el artículo El Volcán Teneguía.
La variedad de cactus y líquenes es alucinante, auténticos pioneros en ocupación de rocas. Y sus habitantes más numerosos, unos inquietos lagartos te guiarán durante el trayecto.
PASARELA VOLCÁNICA: MODELO DISCRETO Y ELEGANTE
(Teneguía Negro clásico)
En las fotos superiores tomadas a más distancia, podéis ver el color negro carbón que presenta el Teneguía al situarnos más lejos. Una perspectiva totalmente marciana. Pero siempre en su línea estética, elegante y formal. Si queréis saber cómo sigue cambiando de color este volcán, seguid leyendo los siguientes apartados. Se vuelve rompedor y ecléctico, pero sin perder su clase.
Aunque no se trata de una zona densamente poblada, si existe una actividad agrícola significativa en algunos sectores, como los cultivos de plataneras en la isla baja, sobre los terrenos ganados al mar por la lava, o las viñas en las vertientes orientales, de las que se extrae un vino malvasía de excelente calidad.
El sendero continúa en dirección al faro del extremo sur de la isla, donde se localizan las Salinas de Fuencaliente. Además de su interés patrimonial suman su catalogación como Sitio de Interés Científico, debido a la avifauna limícola que se desarrolla en su entorno. A estas alturas de la ruta, el paisaje volcánico ya nos había enamorado, con unos senderos desiertos y exclusivos para nosotros.
9. TENEGUÍA: LA ÚLTIMA ERUPCIÓN EN ESPAÑA (1971)
PASARELA VOLCÁNICA: MODELO SAFARI EXPLORADOR
(Teneguía Naranjas y Ocres)
Una vez metidos en las entrañas del cráter, el artista cambia completamente de registro para ofrecer una recompensa al que ha llegado hasta allí. Rompe su línea clásica y ofrece a la vista una faceta más alegre y colorida. Con sabor veraniego, casi caribeño, se viste con naranjas y rosas, sobre un manto de terciopelo marrón, con virutas de chocolate incluidas. Un modelo que recuerda su lado más dulce, con camuflaje de rico bombón artesano.
Desde el día 15 de octubre de 1971 se venía registrando una gran actividad sísmica que desencadenó una gran erupción, poniendo en peligro a los vecinos palmeros de Fuencaliente. Ahí fue donde surgió el volcán, con varios focos de norte a sur, y que poco a poco fue transformando el diseño orográfico del sur de la isla bonita.
El derrame de lava ganó terreno al mar, fosilizando un cantil costero y un delta de lava, y haciendo crecer el tamaño de superficie de la isla. Desde entonces, La Palma se convirtió en un importante atractivo turístico gracias a esta famosa erupción, que continúa siendo la más reciente sobre tierra española.
Por suerte, no afectó a zonas pobladas pero produjo daños materiales a los viñedos. También destruyó una playa, pero lo compesaría creando otra nueva: la playa de Echentive. Al volcán se le dio el nombre de Teneguía por un roque situado próximo al punto de origen, que en su día fue nombrado por los antiguos canarios predecesores.
Una joya geológica volcánica.
Muchos de los paisajes naturales que podemos ver hoy en día, son el resultado de largos períodos temporales. El Teneguía nos brinda la oportunidad de conocer sobre el terreno, en tiempo histórico, al nacimiento de un paisaje natural donde la roca y otras estructuras volcánicas constituyen los elementos esenciales de su composición.
Por toda la ruta de los volcanes se divisa un brutal complejo natural de magma. Toda la gama de colores presente en un cuadro infinito para la vista. Y con olor a salitre, desafiando al horizonte del océano Atlántico.
La principal recomendación para pisar cualquier tipo de suelo volcánico, muy sensible a la erosión, es no salirse de los caminos marcados. Nunca hay que retar a la naturaleza.
10. DEL TENEGUÍA AL FARO DE FUENCALIENTE
La última parte de la ruta discurre desde Los Canarios hasta las salinas y el faro de Fuencaliente, la codiciada meta del senderista de la Ruta de los Volcanes, que ténicamente se corresponde con el sendero GR-131. Es una de las áreas más inhóspitas del trayecto. Como veis en la foto inferior, una vez completas el descenso del volcán Teneguía, puedes asomarte a otro cono volcánico más pequeño y retomar el camino principal. Si no te has desviado al cráter del Teneguía, ya estarás enfilando tu destino.
De todos modos, siempre hay indicaciones cercanas así que no tendrás problema para volver al camino. Una vez superas al Teneguía, comienza el descenso por un estrecho camino serpenteante que cruza la carretera asfaltada que llega al faro. Siempre tendrás su contorno en el horizonte como guía para terminar una de las rutas naturales más atractivas de la isla de la Palma.
Si has partido del Refugio del Pilar y te encuentras cansado al llegar a Los Canarios, nuestro consejo es que pliegues patas y dejes la segunda parte de la ruta para otra jornada. Pero si te ves con fuerzas puedes seguir del tirón, porque apenas son unos 6 kilómetros y de bajada. Calculad un par de horas aproximadamente, con paradas ‘fotográficas’ incluidas y abundantes.
Es una ruta sencilla con tramos de cierta pendiente y con un sendero delimitado por piedras, que transcurre al descubierto, sin vegetación que pueda dar sombra. Volvemos a insistir en la necesidad de ir con provisiones de agua, crema solar y algún tipo de gorro para cubrirse de sol.
En la primera parte predominan bonitas vistas de los viñedos de uva malvasía, que hace tan famosos los vinos canarios. Y conforme vas descendiendo, gana presencia en el horizonte el Faro de Fuencaliente. Con luz, guía a los marineros, y sin luz, consigue hacerlo con los senderistas. Aclarar que en realidad, verás dos faros. Uno de piedra de principios del siglo XX, que sufrió daños durante la erupción del Teneguía, y el de nueva creación pintado con líneas rojas y blancas.
Cuando el mar comienza a impregnar el ambiente de salitre, estás llegando a tu meta, donde podrás quedarte a ver un atarecer espectacular. Por supuesto que no falte un baño en la playa, que después de la ruta será una bendición. Pero si te queda tiempo, te damos unos consejos más adelante para acercarte a otras playas más bonitas a tiro de piedra.
Los dos faros de Fuencaliente: uno de principios del siglo XX que sufrió serios daños durante la erupción del volcán Teneguía, y el nuevo que construyeron al lado tras el incidente natural. En el año 2006 se reconstruyó el viejo faro para acoger el Centro de Interpretación de la Reserva Marina de la isla de La Palma, para fomentar el respeto por el medio marino y la pesca.
El viejo faro fue construido en 1880 dando luz por primera vez en el año 1902 hasta 1939, cuando Fuencaliente sufrió un terremoto importante. La estructura quedó dañada en la base superior, donde se elaboró un pequeño balcón que observamos hoy en día. Su segunda cicatriz fue tras las erupciones volcánicas de 1971, y que trajo como consecuencia la construcción de un nuevo faro. Fue inaugurado en 1985.
Este año 2020, el ayuntamiento de Fuencaliente buscaba instalar en el faro un observatorio y un centro de investigación en colaboración con la Universidad de La Laguna, para estudiar la acidificación de los océanos. Fomentar la llegada de turistas a la zona y servir de actividad divulgativa para los centros educativos, eran otras funciones de este convenio. Al menos antes de que llegase la pandemia.
Además del faro de Fuencaliente, podrás conocer sus salinas, todo un espacio de alto valor científico, que aportan el toque rosa en medio de unos paisajes tomados por la oscuridad de los volcanes. A orillas del Atlántico, donde bate pletórico contra las rocas de magma, se puede realizar un pequeño recorrido para conocer el proceso de obtención de la sal.
El Faro de Fuencaliente se ubica en el entorno del Parque Natural de Cumbre Vieja, ofreciendo al viajero la conquista de la playa del Faro. De arena negra volcánica y enclavada en un parajes singular situado entre los dos faros, puede ser ideal para un baño al terminar la caminata.
A unos minutos tenéis playas más espectaculares como Echentive, creada por la erupción del volcán Teneguía en el año 1971. Otra buena opción para el chapuzón final después de la ruta, y antes de que caiga el sol.
Broche de agua marina para cerrar una ruta de lo más terrestre. Un mar y montaña de toda la vida.
LA RUTA NO ES CIRCULAR
Recordad que vuestro coche está estacionado en el Refugio del Pilar o en Los Canarios, así que tendréis que coger un autobús que os lleve hasta allí. Otra opción es conseguir un taxi.
Si te apetece conocer sus fondos marinos puedes reservar este tour para practicar snorkel en Fuencaliente o realizar un bautismo de buceo en este mismo entorno.
11. EL FARO Y LAS SALINAS DE FUENCALIENTE
Una ruta natural tan espectacular como esta no podía terminar en cualquier sitio. A los pies del faro de Fuencaliente, se asientan unas salinas de gran interés para la ciencia. Son las únicas que siguen funcionando en toda la provincia de Santa Cruz de Tenerife, y lo hacen de forma artesanal desde el año 1967. Conforman un espacio natural protegido para su imprescindible conservación medioambiental.
Las salinas no son típicas de las Canarias occidentales, y en ellas habitan varias especies limícolas. Como el resto de la isla, se encuentra dentro de la distinción de Reserva de la Biosfera de La Palma. Se sitúan en la parte más meridional de todo el territorio isleño y presumen de la distinción de Sitio de Interés Científico.
Las salinas se encuentran dentro del Monumento Natural de Los Volcanes de Teneguía, donde tuvo lugar la última erupción volcánica de las islas. El acceso es gratuito. Con este último punto cerramos una Ruta de los Volcanes que sacia al caminante con paisajes de otro planeta y con unas panorámicas extraordinarias y marcianas.
Los colores que nos ofrece la geología sorprenden a cada paso, aunque no sea la primera vez que pisas un territorio volcánico. Hemos estado en otros volcanes como el Bromo o el Kawah Ijen en Indonesia o en los que nos han regalado Azores y Madeira pero cada archipiélago es un mundo. Muchas islas acaban siendo pequeños continentes y aquí se cumple la regla.
Recorrer la espina dorsal de la isla de La Palma es todo un imprescindible para conocer el sur de la isla bonita. Poder hacer la ruta completamente solos, ha sido un lujo impensable en otras épocas.
Puedes recorrer por libre los paisajes de Fuencaliente o reservar este tour por el sur de La Palma donde también conocerás el Teneguía, el volcán más joven de Canarias.
12. FAUNA Y FLORA DE LA RUTA
A pesar de que la Palma es una de las islas canarias con mayor superficie boscosa, tanto de pinos como de laurisilva, aquí venimos a hablar de lo contrario. De las escasas especies naturales que tienen como ecosistema el entorno volcánico de la parte sur del territorio palmero. En cuanto a la agricultura, los cultivos principales de toda la isla, son el plátano y la vid. Las plataneras por aquí no aparecen, aunque algunos viñedos si hemos visto a la falda de algunos volcanes como el Teneguía.
Debido a su formación y localización, La Palma presenta un gran abanico de paisajes, con una generosa diversidad de ecosistemas. Esta ruta es un buen ejemplo. Podrás ver diferentes modos de vida dependiendo de la altura a la que estés caminando, y de las caraterísticas geológicas y químicas del entorno.
Aunque todo te parezca terreno gris o negro infértil, es ahí donde más sorprende el impulso de la naturaleza. Una ganadora en condiciones, a priori, desfavorables. Adaptación al medio. Evolución. El entorno de la ruta de los volcanes es todo un reto, del que vuelve a salir airosa.
Porque la naturaleza consigue poner el toque de color justo y necesario, en medio de parajes interestelares.
A lo largo de la caminata, nos cruzaremos a menudo con un curioso amigo: el lagarto tizón. Los machos son más llamativos que las hembras por su moteado y mancha de color azul en el pecho. Cuando oigas murmullos o pisadas, no te preocupes, serán tus guardaespaldas durante todo el itinerario. Son muy divertidos y hay zonas en donde verás auténticas ciudades de estos escurridizos reptiles.
En todas las islas canarias existe un gran número de especies de lagartos gigantes endémicos. El número de individuos presenta unos niveles críticos en ciertas poblaciones, lo que las ha colocado en la lista roja de especies amenazadas elaborada por la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza). Están catalogadas en estado de peligro crítico, un paso previo a la categoría de extinto.
Os recomendamos entrar en nuestra sección de VIAJES DE NATURALEZA para conocer más ecosistemas y paisajes increíbles del mundo.
La graja, el pinzón palmero o la paloma rabiche, son algunas de las especies de aves que sobrevolarán tu cabeza en la isla. Aunque los lagartos fueron nuestros favoritos durante todo el viaje. Los acompañantes perfectos, atractivos pero discretos.
La isla no solo recibe agua a través de precipitaciones, sino que además y lo hace a través de la lluvia horizontal. Los vientos alisios traen nubes a una cota baja chocando con el relieve de forma constante durante casi todo el año, formando brumas que la vegetación aprovecha. Un ejemplo es el pino canario, que al tener sus hojas en forma de agujas, actúan como filtro condensador y permiten que esa nieblina se precipite sobre la base del árbol.
En las proximidades del área recreativa de El Pilar podemos encontrar el pino canario junto al pino de California, especie que se introdujo en los años 40 con fines madereros compitiendo con el pino canario. Se distinguen porque las acículas del pino canario van el grupo de tres y son más largas. Las de Pinus radiata van en grupos de dos y son más cortas.
La variedad de cactus nos conquistó por completo con esos tonos sacados de la moda de los años 90, colores ácidos y fluorescentes, asentados sobre mantos oscuros que realzan su figura. Una verdadera maravilla. Pequeños detalles que adornan el paseo hasta las cimas de los reyes volcánicos. Allí donde a lo lejos no ves nada, aparece un submundo con muchas ganas de vida.
Quizás por el contraste con la vegetación tan diferente que nos rodea en la Península, los ecosistemas resultan muy interesantes y atractivos. Pero esto es sólo una parte pequeña de la isla de La Palma.
13. ¿DÓNDE COMER Y DORMIR?
La ruta no es circular por lo que necesitarás transporte al final de trayecto para volver al punto de partida.Puedes coger autobús hasta Los Canarios y allí coger otro transbordo, o hacerte con un taxi.
Si necesitas reponer fuerzas durante la ruta, lo mejor es que hagas parada en Los Canarios. Cerca del Centro de Visitantes del volcán San Antonio hay un restaurante para los que finalicen etapa.
Se llama ‘La Casa del Volcán’, una casona de piedra con viñedos muy apetecible para comer y descansar. Si completáis la ruta hasta el faro de Fuencaliente, hay un bar/restaurante en las salinas.
¿DÓNDE DORMIR EN LA ISLA?
La isla bonita ofrece innumerables propuestas de turismo rural para los viajeros. Casas de arquitectura tradicional con mucho encanto pero también hoteles coquetos donde perder la noción del tiempo. Seleccionamos 10 alojamientos top en La Palma, muchos de ellos con piscina exterior.
ACTIVIDADES Y EXPERIENCIAS
Estas son algunas de las actividades más demandadas en la isla. En temporada alta conviene reservar con antelación.
Puedes reservar tu plaza directamente en estos enlaces, recuerda que la mayoría tienen cancelación gratuita hasta 24 horas antes.
Si no dispones de coche de alquiler puedes contratar traslados privados para moverte por la isla.
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