Anento: uno de los pueblos más bonitos de España
Anento es un pueblo con encanto situado en el valle del Jiloca, a una hora de la ciudad de Zaragoza, que forma parte de la asociación de Pueblos Más Bonitos de España.
Su pequeña iglesia románica dedicada a San Blas alberga el retablo gótico de mayores dimensiones de Aragón, que permanece desde hace 500 años en su ubicación original.
Un castillo medieval del siglo XIV, que sirvió de refugio y resistencia contra los ataques de los soldados castellanos de Pedro el Cruel, corona un tozal de tierra rojiza en un bonito enclave de pinares que cuenta con un merendero perfecto para hacer una parada para comer o merendar.
Otra visita imprescindible es Aguallueve, un manantial de paredes de piedra y musgo con pequeñas grutas en su interior que se puede explorar a través de una sencilla ruta.
Si visitas esta localidad en el mes de julio podrás asistir a las Jornadas Medievales de Anento donde se recrea la defensa del castillo llevada a cabo por Martín Polo, escudero del rey Pedro IV de Aragón, durante la Guerra de los Pedros.
A principios de los años 80 estuvo a punto de desaparecer al estar habitado por una única persona. Sin embargo, en 1987 empezaron a llegar familias y ahora cuenta con más de 100 habitantes.
Desde TrotandoMundos nos alegramos de que este rincón con historia y encanto sobreviva a los tiempos modernos. ¿Nos acompañas en nuestro paseo por Anento?
Disfruta del videoblog de Anento
Antes de empezar a leer el artículo te invitamos a ver el reportaje de Anento en nuestro canal de viajes de Youtube. Una guía visual de cinco minutos que te mostrará lo mejor de esta localidad.
Qué ver y hacer en Anento
La localidad de Anento cuenta con oficina de turismo, un restaurante, varias casas rurales y un albergue para los que quieran pasar la noche. Si sólo estás de paso, el pueblo se puede ver en una hora y si quieres ir hasta Aguallueve tendrás que sumarle otra hora a mayores.
Está prohibido aparcar en las calles de Anento pero el Ayuntamiento ha habilitado un parking en la entrada del pueblo para dejar el coche sin límite de horas. Tiene un coste de 2€ y deberás sacar una ficha en la máquina que hay en la Oficina de Turismo. El dinero recaudado se invierte en el mantenimiento de Anento y de su entorno.
1. Iglesia de San Blas
La iglesia de San Blas data del siglo XIII y es el monumento más importante del pueblo de Anento. Un templo románico que esconde un retablo gótico del siglo XIV, obra del maestro Blasco de Grañén, dedicado a San Blas, Santo Tomás de Becket y la Virgen de la Misericordia.
Es el retablo de mayores dimensiones de Aragón que veremos con detalle en el siguiente apartado. En las capillas laterales de la Iglesia también se pueden ver otros retablos del siglo XVI como los de San Juan Bautista, San Roque y San Antonio.
El campanario tiene cuatro vanos apuntados con arco interno que se data del siglo XIII.
En el siglo XIV se le añadió el pórtico del lado sur donde aparece la puerta de entrada original a la nave: un arco de medio punto con dos arquivoltas decoradas con dientes de sierra y con rosetas. El pórtico se cubre con bóveda de crucería y con los palos de Aragón en las claves. Los expertos piensan que toda la iglesia estuvo decorada con pinturas murales de las cuales solo se conservan las del ábside.
En el siglo XVI se edificaron el magnífico púlpito mudéjar con labores caladas en yeso combinando estrellas con cruces, y el coro de la iglesia, cuya viga principal está tallada con trabajo de espiga y las bovedillas con relieves en yeso de tallos y uvas.
Las visitas guiadas se realizan de miércoles a domingo a las 12:30h siempre que haya un grupo mínimo 6 personas. La entrada tiene un coste de 2€ y se compra en la oficina de turismo. No se reservan entradas, el acceso es por orden de llegada hasta completar aforo.
Para las reservas de grupos hay que enviar una solicitud a ofanento@comarcadedaroca.com.
2. Retablo de San Blas
Mención aparte merece el retablo de San Blas, de la Virgen de la Misericordia y de Santo Tomás Becket del Maestro Blasco de Grañén, uno de los mayores representantes de la pintura gótica aragonesa.
Ocupa todo el presbiterio y se compone de un cuerpo dedicado a los tres santos y sus escenas narrativas con nueve calles de tres alturas, mientras que en la parte inferior vemos un banco común de once casas, cinco a cada lado de la central destinada al sagrario. Alrededor del conjunto hay un guardapolvo que actúa como marco protector.
En el banco se pintaron escenas de la Pasión y Muerte de Cristo, desde su entrada en Jerusalén hasta el Santo Entierro. En el cuerpo del retablo se representan pasajes de la vida de San Blas, obispo de Sebaste (parte central), escenas de la vida de la Virgen María (a la izquierda del observador) y pasajes de la leyenda de Santo Tomás Becket (a la derecha).
En el tercer piso se plasman figuras de santos de devoción universal como San Miguel Arcángel, Santa Catalina de Alejandría, Santa Lucia de Siracusa, Santa Bárbara y los profetas David e Isaías.
El coronamiento de la calle central se dispuso el Calvario y en los guardapolvos se observan ángeles mancebos con los instrumentos de la Pasión o «armas de Cristo» acompañados de los escudos de los comitentes de la obra: los arzobispos don Francisco Clemente Capera y don Dalmau de Mur.
3. Ruta de rincones con encanto
Anento es un pueblo precioso perfecto para perderse por sus callejuelas y cuenta con una Ruta de Rincones con Encanto que puedes seguir sobre el mapa que te darán en la Oficina de Turismo o simplemente dejar que te encuentren ellos mientras te dejas llevar por su trazado arquitectónico.
En todo caso, hay carteles informativos que señalan los puntos más pintorescos del pueblo.
A simple vista resulta evidente que los vecinos disfrutan engalanando las fachadas de sus casas con pequeños detalles además de plantas y flores que embellecen aún más las calles. Su título de Pueblo Más Bonitos de España es merecido y uno puede llevarse unos maravillosos recuerdos fotográficos.
Durante el recorrido puedes ver la pequeña Ermita de Santa Bárbara de planta rectangular a la que se accede mediante una escalinata. Es una iglesia austera en su decoración con un retablo donde destaca la imagen de Santa Bárbara, fácilmente identificable por su espada.
Hasta aquí os hemos contado lo que se puede ver y hacer en el propio pueblo de Anento pero sus alrededores nos regalan unas cuantas paradas interesantes, tanto monumentales como naturales.
4. Castillo de Anento
En lo alto del pueblo se encuentra el Castillo Medieval de Anento que fue construido en el siglo XIV y que, gracias a su posición estratégica, sirvió de refugió y resistencia contra los ataques de los castellanos de Pedro el Cruel.
De su estructura se conserva el foso de piedra, un puente levadizo para su acceso y tres torreones a los que se puede subir. Su acceso es libre y gratuito.
En el mes de julio se celebran las jornadas medievales de Anento en las que se recrea la defensa de Castillo encabezada por Martín Polo (escudero del rey Pedro IV de Aragón) durante la Guerra de los Pedros.
El frente oriental conservado es de unos 30 metros de longitud con varias almenas con remate piramidal y saeteras en la muralla. Hay dos torres gemelas entre las que se sitúa la puerta semicircular a la que se accedía por un puente levadizo sobre el foso.
Se rodea de un fabuloso paraje de pinares y hay merenderos para comer o hacer un picnic.
5. Manantial de Aguallueve
Anento es muy famoso por albergar el tesoro natural de Aguallueve, un manantial de agua que con su goteo constante ha creado un relieve kárstico con paredes de piedra y musgo que parece sacado de un cuento de hadas.
En invierno se hiela y forma estalactitas cobrando mayor belleza pero realmente merece la pena verlo en cualquier época del año. El sendero nos regala unos fantásticos paisajes del valle llenos de contrastes entre la vegetación verde y los tonos rojizos de la arena arcillosa.
Llegar hasta él se hace a través de un sendero muy sencillo de apenas 2.5 kilómetros. En la Oficina de Turismo facilitan un mapa y explican cómo llegar hasta Aguallueve, aunque la ruta está perfectamente señalizada y no tiene pérdida.
El agua acaba en una especie de piscina pero el baño está prohibido. Esta balsa que acumula todas las filtraciones atestigua la cantidad de agua subterránea que brota en este lugar de Aguallueve.
6. Torreón Celtíbero
Los restos del Torreón de San Cristóbal son un ejemplo de la ocupación celtíbera de la zona en lo alto del valle de Aguallueve. Datan del año 200 a.C. aproximadamente y desde estas ruinas se obtiene una de las mejores panorámicas del pueblo de Anento y su entorno geológico.
Se puede llegar hasta a pie continuando la ruta de Aguallueve (está señalizado) pero también puedes llegar cómodamente en coche: antes de llegar a Anento hay un desvío que te llevará a una explanada para aparcar y desde ahí son 5 minutos andando.
Los celtíberos vivían en distintos tipos de asentamientos denominados poleis o urbes, civitates, vici y castella. Las poleis o urbes eran del tipo de la ciudad-estado antigua con un núcleo urbano más o menos desarrollado y un entorno agrario dependiente.
Las civitates eran organizaciones políticas indígenas autónomas que podían tener o no una configuración urbana. Los vici y castella eran los asentamientos menores donde la mayoría de la población vivía dispersa en poblados o en torno a las torres defensivas.
Se cree que aquí pudo haber un asentamiento vici y castella.
7. El Recuenco
El recuenco es un paraje formado por el desprendimiento natural de tierra debido a las lluvias y otras inclemencias climatológicas con forma de recuenco. Una pequeña hondonada de paredes de rocas, compuestas principalmente de carbonato de cal y arcilla en proporciones casi iguales, y coronada por un par de metros de piedra caliza.
Casi en la cima de la montaña hay una serie de cuevas excavadas aprovechando el terreno arcilloso, justo bajo el tozal sobre el que se asienta el castillo. Se cree que pudieron ser almacenes de grano para tiempos de asedio o tal vez para alojar a los animales, ya que se encuentran tallados unas especies de pesebres en algunas paredes.
Otra teoría apunta a que fueron utilizadas como refugio, ante tormentas, nevadas o el frío. Hoy en día su acceso se ha complicado por lo escarpado del terreno, pero antiguamente había un sendero que llevaba hasta las cuevas con unas magníficas vistas sobre el pueblo y el valle del Aguallueve.
Los paisajes rojizos son cautivadores en contraste con los ráboles de un verde intenso creando un marco perfecto para el pueblo de Anento.
Algunas casas cuentan con pequeñas cuevas en su interior que sirven como bodegas o incluso como habitaciones con la ventaja de que mantienen una temperatura estable porque la montaña hace de aislante manteniéndolas frescas en verano y no demasiado frías en invierno.
8. Ruta entre Aguallueve y Arguilay
En Anento hay varias rutas de senderismo siendo la más habitual la que conduce a Aguallueve, que se puede ampliar hasta Castillo de Anento o incluso hasta el Torreón Celtíbero. La información de estas rutas os la explican con detalle en la Oficina de Turismo sobre el mapa.
Un sendero más extenso es el que recorre el Aguallueve de Anento y el de Arguilay con varios manantiales durante el recorrido y unas vistas espectaculares. Se pueden ver corzos y otros animales durante la caminata que discurre al borde del barranco, un dato importante para las personas con vértigo.
No se recomienda hacer esta ruta ni en pleno invierno (por la nieve y el hielo) ni en verano porque hay tramos largos sin sombra que pueden requerir un mayor esfuerzo cuando el sol aprieta.
RUTA AGUALLUEVE – ARGUILAY
- Sendero: 12 km
- Duración estimada: 3,5 horas
- Dificultad: media / baja
- Desnivel: 284 metros
- Altitud: 1016 metros
RUTA AGUALLUEVE – ARGUILAY
Sendero: 12 km
Duración estimada: 3,5 horas
Dificultad: media / baja
Desnivel: 284 metros
Altitud: 1016 metros
Oficina de Turismo
Nada más llegar al pueblo deberás ir a la Oficina de Turismo para adquirir en una máquina una ficha para el aparcamiento del pueblo, que da acceso a estacionar todo el día. De paso puedes reservar tu plaza para la visita guiada de la iglesia de San Blas de las 12:30 horas, de lo contrario, no podrás visitar su interior porque suele estar cerrada.
Por último, aprovecha para que te expliquen cuáles son los puntos más importantes que ver en el pueblo y las indicaciones de la ruta de Aguallueve, marcando en el mapa los detalles relevantes.
DATOS PRÁCTICOS
Aparcamiento: 2 € por día (sólo funciona con monedas de 1€ y 2€)
Visitas guiadas San Blas: 12:30 horas (puedes consultar el calendario en la oficina de turismo)
Oficina de Turismo Teléfono: cierra lunes y martes. Teléfono 687 079 938
COMER EN ANENTO
En Anento solo hay un restaurante por lo comer en temporada alta no es tarea fácil. Para tomar una cerveza o un café también hay otro bar al lado de la Iglesia de San Blas.
Jornadas medievales de Anento
La localidad zaragozana de Anento viaja al medievo cada 22 y 23 de julio durante las XVI Jornadas Medievales que recrean la defensa del castillo llevada a cabo por Martín Polo, escudero del rey Pedro IV de Aragón, al hacer frente a las tropas del rey de Castilla, Pedro I.
Las tropas castellanas, en su avance hacia Valencia, asediaron el pueblo de Daroca y quisieron conquistar el castillo de Anento durante la llamada Guerra de los Pedros en el año 1357.
Dormir en Anento y alrededores
En un pueblo tan pequeño apenas hay opciones de alojamiento más allá del HOSTAL LOS ESQUILADORES pero hay más alternativas a tan sólo 5 o 10 minutos en coche.
EL ZAMACÉN se ubica a 5 km de Anento en la localidad de Burbáguena. Cuenta con terraza, restaurante, bar, wifi gratis, servicio de conserjería y zona de juegos infantil. Las habitaciones tienen aire acondicionado y baño privado.
POSADA DEL ALMUDÍ. Un hotel en el centro de Daroca que ocupa 2 edificios: un palacio del siglo XV reformado y un edificio más moderno. Dispone de restaurante, bar, recepción 24 horas y una sala de juegos. Las habitaciones tienen Wi-Fi gratuito, aire acondicionado y desayuno incluido en el precio.
HOTEL CIENBALCONES. Este hotel ocupa un edificio de los años 30 en el centro histórico de Daroca. Cuenta con restaurante, terraza, WiFi gratuita. Las habitaciones tienen aire acondicionado, baño privado, calefacción y TV.
LA CASA DE LAS ALDEAS. Este edificio reformado del siglo XVIII que ofrece aparthoteles con patio y terraza compartida, biblioteca, sala de juegos y servicio de lavandería. Todos disponen de TV de pantalla plana vía satélite, conexión WiFi gratuita y cocina equipada.
Cómo llegar a Anento
En coche
Si vienes desde Zaragoza en coche deberás coger la Nacional 230-N y si vienes desde Teruel la 234-N hasta Báguena. Desde el interior de la población coger el camino-rambla hasta Anento.
Otra opción es optar por la autovía mudéjar A-23 tomando la salida 206 “Anento-Lechón”. Después se conduce un tramo por la carretera A-2510 hasta Lechón y desde allí por la carretera CV-927 hasta Anento.
En autobús o en tren
Si viajas en autobús deberás llegar hasta Daroca o Báguena y hacer un transbordo. En caso de que vayas en tren deberás llegar a Ferreruela de Huerva, localidad situada a 12 kilómetros de Anento.
Puedes consultar aquí los horarios de buses y trenes.
Lugares de interés próximos
- Ciudad de Daroca (14 km)
- Laguna de Gallocanta (25 km)
- Hoces del Rio piedra en Torralba de los Frailes (48 km)
- Monasterio de Piedra (52 km)
- Museo minero de Escucha (66 km)
- Castillo de Peracense (70 km)
- Ciudad de Zaragoza (85 km)
- Cuevas de cristal de Molinos (97 km)
- Ciudad de Teruel (99 km)
¿Te ha gustado el artículo? ¡Comparte!
ARTÍCULOS DE ARAGÓN
DESTINOS EN ESPAÑA
PLANIFICA TUS VIAJES
Descubre más destinos
Daroca
Vigilada por los restos de su antiguo castillo surge Daroca, una de las ciudades más bellas de Aragón. Sin duda, uno de los encantos de la villa es recorrer sus murallas, con sus imponentes torreones, hasta llegar al castillo, desde el que podrás disfrutar de una hermosa panorámica.
En el centro del valle del Jiloca, en pleno Sistema Ibérico y vigilada por los restos de su antiguo castillo, surge Daroca, una de las ciudades más bellas de Aragón.
Daroca constituyó primero una avanzadilla en la conquista cristiana y, después, territorio de frontera, por lo que fue fuertemente amurallada. De lo que en su día fue el recinto amurallado más extenso de Aragón –con más de cuatro kilómetros de largo de muralla- quedan espléndidas muestras como el Portal de Valencia, la Puerta Baja o la Puerta del Arrabal, que te darán la bienvenida.
Sin duda, uno de los encantos de la villa es recorrer sus murallas, con sus imponentes torreones, hasta llegar al castillo, desde el que podrás disfrutar de unas hermosas vistas de la ciudad.
De su época de esplendor conserva un legado de más de doscientos edificios catalogados. En el corazón del casco histórico encontrarás la espléndida basílica de Santa María, donde se conservan los Sagrados Corporales, testigos del milagro acaecido en la ciudad en el siglo XIII, cuando unas sagradas formas sangraron misteriosamente durante un inesperado ataque musulmán. Y en el caserío, piérdete por las calles de la judería, asentada en el actual Barrio Nuevo.
La nómina de iglesias se completa con la románica de San Miguel, con extraordinarias pinturas murales góticas de gran colorido, y las de San Juan y Santo Domingo de Silos, que comenzaron a construirse en el siglo XII, en estilo románico, concluyéndose en el XIII con técnicas mudéjares.
Caminando por sus empinadas calles encontrarás, además, hermosas casas señoriales como el palacio de los Luna, la antigua Casa de Canónigos , el palacio de Gil Bernabé y el antiguo Hospital de Santo Domingo, actualmente sede del Museo de la Historia y las Artes.
Y hablando de museos… No dejes de visitar el Museo de la Pastelería Manuel Segura. Es tal la tradición gastronómica de la localidad que cada año, en torno al mes de mayo, celebra una muestra que tiene a la pasta y el dulce como protagonistas. Otras citas que también reúnen a un buen número de visitantes y que te recomendamos no perderte, son sus fiestas medievales y el Festival de Música Antigua, otras pruebas de la raigambre de lo medieval en esta localidad, una de las culturalmente más ricas de todo Aragón y que, por cierto, es nombrada en el Cantar del Mio Cid.
- Teléfono: 976 80 01 29 (oficina de turismo)
- Teléfono: 876 634 125 / 648 799 405 (Territorio Mudéjar)
- Email: ofdaroca@comarcadedaroca.com
- Email: info@territoriomudejar.es
Judería de Daroca
Desde su fundación, Daroca albergó una importante comunidad judía que se asentó en lo que en la actualidad es el Barrio Nuevo. Algo más de cuarenta familias habitaban esta judería que formaba parte de una de las colectividades hebreas más importantes del Jalón, junto con Calatayud.
El trazado de la judería presenta una clara inspiración islámica. Desde su fundación, Daroca albergó una importante comunidad judía, que se asentó en lo que en la actualidad es el Barrio Nuevo. En la plaza de este barrio se ubicaba la sinagoga.
En el período más primitivo ocupó un espacio situado entre el Castillo Mayor y el barranco de la Grajera. Durante los siglos XIII y XIV, se proyectó también hacia el margen derecho de la Calle Mayor. A partir de siglo XV se pasa a denominar ‘judería nueva’ a la zona delimitada por la plaza de la iglesia de San Pedro, el promontorio del Castillo Mayor, la muralla y la Calle Mayor.
Algo más de cuarenta familias habitaban esta judería que formaba parte de una de las colectividades hebreas más importantes del Jalón, junto con Calatayud.