Ruta por la Costa Blanca
Villajoyosa – Altea – Calpe – Guadalest – Polop
1. VILLAJOYOSA: ALEGRE Y PINTORESCA
Mantiene su esencia marinera y jovial
Villajoyosa o La Vila Joiosa se traduce como La Villa Alegre y nada más poner un pie lo entenderás: pintorescas casas con coloristas fachadas y balcones de flores conquistan a todo visitante. La capital histórica de la comarca costera de la Marina Baixa se presentan como una localidad mediterránea, marinera y comercial.
Popularmente conocida como «La Villa» es uno de los pueblos estrella de la Costa Blanca de Alicante. Un enclave precioso que se mantiene aislado de los grandes centros urbanísticos que lo rodean como Calpe o Benidorm.
Lo arropan las cumbres de la sierra de Aitana mientras que una serie de barrancos lo separan de la comarca vecina del Alacantí. Un marco natural que le pone la guinda a esta localidad valenciana tan seductora.
Lo que nos ha gustado de Villajoyosa es su turismo discreto y relajado. Un modelo de urbanismo responsable hacen que este tradicional pueblo de pescadores sea el contrapunto al bullicio de otras localidades cercanas.
Si a esto le sumamos sus 15 kms de costa con numerosas playas para el ocio y el relax, y rutas de senderismo por la sierra,sale ganando en comparación con otros puntos próximos y más afamados de la Costa Blanca.
CASCO ANTIGUO Y PASEO MARÍTIMO
Pocas recomendaciones más allá de callejear por su casco antiguo y caminar por su paseo marítimo con opción a darse un chapuzón o ponerse un rato al sol. Algunas calles destacadas son el Carrer Arsenal, Carrer del Pal, Pou o Sant Pere, en todas ella el arcoiris de las fachadas cobra su mayor esplendor.
Lo placentero es pasear con mucha calma para fijarse en los detalles de las fachadas o en las escenas cotidianas que llenan de vida este barrio tan acogedor.
CURIOSIDADES DE LAS FACHADAS
¿Sabéis por qué las fachadas están pintadas de colores? Se relaciona con los pescadores y su vuelta a casa después de la faena en el mar. Tras varios días de navegación, orientarse era complicado, y más aún si era de noche o había temporal. Pintar sus viviendas de colores tan potentes era una manera de identificarlas de forma fácil y rápida.
Algo que hemos visto en más lugares del país, también en los pueblos marineros de Galicia. O en localidades europeas como Burano, una isla cercana a Venecia en Italia.
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CURIOSIDADES DE LOS BALCONES
Cuentan que antaño los balcones servían de elemento transmisor de noticias, una manera singular de comunicación. En función del color de la sábana o tela que colgaba de ellos, los vecinos sabían si les esperaban buenas o malas noticias.
Una forma gráfica y visual de conocer el periódico de barrio con sigilo y discreción. La tradición acaba imponiéndose a la modernidad en la era tecnológica de la des-información.
Y es que a buen entendedor, pocas sábanas bastan… y quien sabe si los balcones hablasen… Refranes que definen a la perfección esta costumbre histórica que supera a cualquier periódico en eficiencia, rapidez y creatividad.
LAS CASAS COLGANTES
Otra parada imprescindible son las casas colgantes de Villajoyosa asentadas en la parte vieja de la muralla medieval. Un ejemplo de arquitectura pintoresca adornada con fachadas de colores que continúan la línea jovial y alegre de este enclave del litoral valenciano. Cruzando el puente se obtienen las mejores panorámicas de este rincón tan especial.
Terminamos así un rápido repaso a este pueblo acogedor y animado, ideal para establecer el campamento base y recorrer la Costa Blanca. Si quieres conocer más sobre esta localidad puedes leer este artículo.
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2. ALTEA: LA PERLA BLANCA DE ALICANTE
La cúpula azul del Mediterráneo
Altea tiene fama de ser uno de los pueblos más bonitos de la Costa Blanca a pesar de ser un enclave de lo más turístico. Pero hay rincones que por mucho que se masifiquen siguen manteniendo su encanto. Y esto es lo que ocurre con Altea. Si encima lo visitas fuera de temporada alta (como fue nuestro caso), la magia del Mediterráneo aumenta.
Un lugar pintoresco con sus fachadas blancas, sus calles de piedra y sus cúpulas azules que se ha consolidado como un destino imprescindible y auténtico.
Entre dos gigantes de la urbanización turística alicantina como Benidorm y Calpe, intenta mantener su esencia sin dejarse aplastar por el peso del ladrillo. Y lo consigue aunque apostamos a que no es tarea fácil.
Altea fusiona a la perfección arquitectura y patrimonio ofreciendo en su entorno unas playas estupendas de aguas cristalinas y colores turquesa, sin olvidar rutas de senderismo por las montañas que rodean la comarca de Marina Baixa. Altea es capaz de combinar con sobrada dignidad el turismo de sol y playa con el turismo cultural.
Las cúpulas de un azul marino brillante seducen a cualquiera, como si fuesen olas del océano surcando los tejados de las casitas tan llamativas. Decoran de manera sublime un cuadro típicamente mediterráneo y con sabor a verano todo el año.
CASCO ANTIGUO DE ALTEA
Altea seduce con sus calles empedradas y escaleras vertiginosas al océano. En lugares tan turísticos preferimos lanzarnos a buscar rincones con encanto verdadero. Alejarse de las calles turísticas y fijarse en los pequeños detalles: el hierro forjado de las balconadas, las baldosas que lucen bajo los mismos, o la flora que engalana las vistosas fachadas.
Para el que prefiere la monumentalidad de las paradas clásicas, estas son las más importantes del casco antiguo.
¿QUÉ VER EN ALTEA?
Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo. Del s.XIX en estilo barroco, está rematada por dos preciosas cúpulas de tejas azules.
Plaza de la Iglesia. Epicentro social donde se concentran terrazas, tiendas y restaurantes.
Portal Vell o Puerta de Valencia. Puerta de acceso de las viejas murallas de Altea.
Portal Nou o Puerta del Mar. Otra puerta de entrada de la fortificación.
Casa de Cervantes. Un curioso edificio de estilo neomudéjar de principios del siglo XX.
MIRADORES DE ALTEA
Uno de los miradores más concurridos es el de Portal Vell: un balcón con vistas infinitas a la Costa Blanca y al omnipresente Peñón de Ifach. Pero hay más durante el ascenso al pueblo, que realmente es un mirador en si mismo. Incluso se divisa Benidorm a lo lejos, evidenciando la diferencia entre urbanizar con sentido o con ladrillo. El color azul del océano se tiñe de mechas turquesas para deleitarnos con una estampa caribeña mediterránea.
Palmeras, playas de aguas cristalinas y pueblos blancos colgados de laderas de sierras imposibles completan la oferta para el que decida asentarse unos días en Altea. Una combinación excelente en pleno corazón de la costa alicantina. Si necesitas más información para preparar tu escapada a Altea te recomendamos leer el siguiente artículo.
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3. CALPE Y SU PEÑÓN DE IFACH
Sube a la cima y disfruta de su panorámica
Calpe es uno de eso municipios de la costa mediterránea que ha visto pasar infinidad de culturas por su territorio: íberos, romanos, árabes, cristianos. Calpe, ha sabido conservar bastante bien su casco histórico y sus enclaves naturales tales como el Peñón de Ifach en un territorio que concentra gran parte del turismo de verano en la Costa Blanca.
La mole de rascacielos no es algo que nos conquiste ni mucho menos, pero el casco antiguo de Calpe es bonito con calles empedradas y estrechas, restos de la muralla medieval y un ambiente agradable de terrazas. El Torreó de la Peça es una visita interesante que alberga el Museo del Coleccionismo. Pero el mayor aliciente es la ruta natural que conduce a la cima del Peñón de Ifach.
PEÑÓN DE IFACH
El Peñón de Ifach es uno de los grandes atractivos para los amantes del senderismo y la naturaleza, pero también para los apasionados de las buenas panorámicas o de la fotografía.
Durante el ascenso las vistas del puerto y de la ciudad son magníficas, además de todo el entorno natural de las sierras y las playas. También se puede visitar el Centro de Conservación cultural para conocer un poco más acerca de los diferentes pueblos que habitaron estas tierras.
Su entrada gratuita pero desde el año 2020 hay que reservar previamente ya que el aforo máximo son 300 personas. El tiempo total estimado para los 5 kilómetros de ruta es de unas 3/4 horas, por un camino que está perfectamente señalizado.
LA ARQUITECTURA DE BOFILL
Los aficionados a la arquitectura deben saber que en Calpe ha dejado una importante huella el arquitecto catalán Ricardo Boffil que se deja ver en tres edificios ubicados en lo alto de un acantilado.
Xanadú es un prototipo de Ciudad Jardín que juega con los cubos a diferentes alturas. El Anfiteatro, donde la piscina que parece colgada sobre el mar ocupa el escenario. La Muralla Roja tiene unas vistas preciosas. Los dos últimos son privados y están cerrados al público.
BAÑOS DE LA REINA
Los Baños de la Reina conforman una visita interesante para los amantes del estar a remojo. Se trata de una construcción romana a modo de termas junto al mar. Pero Calpe cuenta con estupendas playas y calas, algunas se encuentran entre las mejores de toda la costa valenciana. Entre las más conocidas: la de Arenal-Bol y La Fossa, y la Cala de Racó o Calalga. Y la Playa Cantal Roig menos masificada.
No escogeríamos Calpe como centro base para recorrer la Costa Blanca con los pueblos encantadores que posee la comarca de la Marina Baixa. Pero hay viajeros que prefieren comodidades y facilidades, sin olvidar a los que buscan ambiente nocturno para salir de fiesta. Para todos ellos Calpe puede ser una buena opción a tener en cuenta.
Para más información sobre transportes, actividades, horarios de museos y monumentos, conviene consultar la página web del ayuntamiento de Calpe.
4. GUADALEST: FORTALEZAS EN LO ALTO
Uno de los pueblos más bonitos de España
Encaramado sobre un lienzo rocoso que sirve de abrigo y defensa se alza El Castell de Guadalest, uno de los municipios más visitados de todo el país, que presume de estar incluido en la catalogación oficial de ‘pueblos más bonitos de España’.
Su castillo en lo alto de la colina nos recuerda la importancia de tener una buena defensa en épocas pasadas. Un cuadro monumental de primera en un entorno natural de bandera. Rodeado por las cimas de las sierras y con un embalse de aguas turquesas a sus pies, conforma una estampa de lo más atractiva en plena Costa Blanca. Menos mar y más montaña.
¿QUÉ VER EN GUADALEST?
El Castell de Guadalest o “Casa Orduña” fue construida por la familia vasca Orduña tras el gran terremoto de 1644 que arrasó la comarca. Fue incendiada y saqueada durante la Guerra de Sucesión (1708).
Iglesia de estilo barroco de Nuestra Señora de la Asunción del siglo XVIII.
Fortaleza del siglo XI creada por los musulmanes y situada sobre la roca más elevada del municipio. Tuvo un papel destacado en la Edad Media y Moderna por su situación estratégica. Los terremotos de 1644 y 1748 y la voladura que de 1708 en la Guerra de Sucesión fueron los culpables de su destrucción.
Prisión del siglo XII. Edificación del siglo XII que se encuentra en los bajos del Ayuntamiento.
MUSEOS CURIOSOS
A pesar de ser una localidad muy pequeña, Guadalest concentra numerosos museos de lo más curioso. Uno de los más visitados es el dedicado a las microfiguras, el museo del terror histórico, el de los saleros y pimenteros, el belén más pequeño de España… cuando menos interesante y original.
Guadalest ha hecho de la singularidad museística un baluarte turístico.
5. POLOP DE LA MARINA
Mucho más que un pueblo de paso
Para la mayoría Polop es un pueblo de paso situado entre las localidades de Altea y Guadalest. Sin embargo este enclave histórico de altura, no tiene mucho que envidiar a esos pueblos que se cuelgan más galones turísticos.
Un lugar estratégico y privilegiado a caballo entre el cobijo del circo de montañas del Valle de Guadalest y el desarrollo del comercio de la costa.
Nuestros ancestros lo sabían y así comenzó la historia: con un viejo fuerte sobre un alto cerro como centinela del valle. No tardó en ser asediado y asaltado desde los íberos hasta los tiempos de la Guerra de Secesión. Para nosotros es una parada imprescindible de la ruta de pueblos con encanto de la Costa Blanca.
Los paisajes de montaña alicantinos con sus laderas excavadas en bancales, la floración de sus almendros o las nieblas en las cumbres de la sierra, ofrecen panorámicas espectaculares. Nos ha sorprendido mucho esta cara salvaje y agreste de la Costa Blanca.
Quizás porque esa denominación excluye a la montaña de manera literal. Pero más allá del léxico hay un mundo de montañas por descubrir que también rodean a Polop como el macizo de Ponoch y los barrancos del Salt y del Canet de Xirles.
¿QUÉ VER EN POLOP?
Castillo de Polop. Una fortaleza de origen musulmán declarada Bien de Interés Cultural en la cima de una colina.
Restos de la antigua muralla medieval en la zona más elevada del castillo, donde solía estar el viejo cementerio.
Iglesia de San Pedro Apóstol y el Santuario de la Divina Aurora, destacan como ejemplos de arquitectura religiosa.
Fuente de los Chorros. Declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, en la Plaza de los Chorros.
Casa Museo Gabriel Miró. En la misma plaza se haya la vivienda del escritor alicantino, autor del famoso libro Años y Leguas.
SENDERISMO Y BARRANQUISMO
Por si fuera poco, esta villa alicantina también ofrece algunos espacios naturales idóneos para los amantes del senderismo y del barranquismo, incluyendo atractivas rutas como la del Barranc de Xirles, el Barranc de la Rubia y el Salt per l’Almasere, entre muchas otras.
Polop es un pueblo acogedor para establecer campamento y recorrer esta región. Ideal para los amantes de la montaña o para los que busquen alejarse del bullicio turístico de la costa en temporada alta. Buscar un alojamiento rural y levantarse con vistas de montaña y la playa al final de la estampa, no tiene precio. Mar y montaña alicantino en toda regla.
ALICANTE
No nos olvidamos de mencionar la ciudad de Alicante, una alternativa para los que prefieran alojarse en una ciudad con más posibilidades a nivel servicios, ocio y restauración. Recomendamos como visita imprescindible el barrio de Santa Cruz por el que se asciende a la fortaleza de Santa Bárbara para seguir con esta línea de rincones con encanto.
A continuación os situamos en el mapa todos los pueblos que hemos recorrido en este itinerario por la Costa Blanca.
MAPA CON LA RUTA DE PUEBLOS
La distancia entre los pueblos no es demasiado grande y podrás visitarlos en un día si madrugas y aprovechas hasta la caída del sol. Nuestro consejo pasa dividirlo en dos jornadas para saborear las visitas y poder comer o tomar algo con calma, descubrir sus rincones escondidos y sacar fotos con la mejor luz al amanecer o al atardecer.
A continuación te dejamos las distancias entre algunos pueblos y el tiempo invertido en la ruta si partimos de Alicante y terminamos en Guadalest. Te harás una idea adecuada del tiempo necesario dependiendo de tus paradas e intereses en cada localidad.
Alicante – Villajoyosa: 40 kms
Villajoyosa – Altea: 20 kms
Altea – Calpe: 10 kms
Calpe – Polop: 22 kms
Polop – Guadalest: 12 kms
Guadalest – Alicante: 60 kms
ALOJAMIENTO EN ALTEA
La Costa Blanca es uno de los epicentros del turismo en España, y por supuesto Altea ofrece un mundo de posibilidades en cuanto a los alojamientos turísticos, sobre todo durante la temporada alta. A pesar de la gran oferta, en verano es necesario reservar con antelación para no quedarse con las peores opciones calidad-precio.
La oferta hotelera abarca un gran abanico de opciones para todos los públicos y bolsillos, desde apartamentos en primera línea de playa como lujosas villas de montaña. El turismo rural está en auge sin olvidarnos de los clásicos: hostales, pensiones, campings y hoteles con encanto.
Hostal Fornet Altea. Buena ubicación justo a la entrada del centro histórico, instalaciones sencillas y precios moderados.
Casa Daci. Un apartamento con encanto en pleno centro histórico de Altea. Dos dormitorios y una decoración exquisita.
OTRAS ALTERNATIVAS EN ALTEA
Hotel Boutique la Serena Adults Only
ACTIVIDADES Y EXCURSIONES
Si no dispones de vehículo para desplazarte a las localidades turísticas más cercanas y no te apetece viajar en transporte público, puedes contratar una excursión organizada.
Hay salidas para visitar pueblos de montaña como Guadalest, enclaves costeros como Villajoyosa, Parques Naturales como El Hondo, además de las paradas imprescindibles de la Costa Blanca.
Sólo tienes que reservar tu plaza y civitatis se encarga de todo lo demás. Si te interesa alguna excursión o visita guiada, pincha en estos enlaces y podrás reservarla directamente.
AVENTURA SOBRE EL AGUA
Hay numerosas actividades de aventura, muchas de ellas acuáticas, que pueden ser la baza perfecta para poner un poco de adrenalina a las vacaciones.
FREE TOURS GRATUITOS
Tampoco faltan los free tours gratuitos en Alicante. Uno centrado en el castillo de Santa Bárbara y otro que recorre los puntos de interés de la ciudad, sin olvidar un itinerario de misterios y leyendas para los amantes de lo desconocido. Puedes reservar tu plaza directamente en estos enlaces.
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