Las burbujas están bien equipadas para que tengas disponible todo lo necesario para una noche romántica bajo la Vía Láctea. En verano puede ser estupendo escoger una fecha próxima a la lluvia de Perseidas que tiene lugar en el mes de agosto. La observación astronómica con el telescopio se puede realizar en la finca exterior, pero si es invierno también es viable hacerla desde el interior, gracias al diseño eco-innovador y sostenible de las burbujas. El universo a tus pies en verano y en invierno.
El check in suele ser un poco antes del atardecer con tiempo para instalarte, disfrutar de la parcela y poder observar la puesta de sol con vistas al mar o a la ciudad de A Coruña. También hay una Torre Astronómica para uso común. A partir de ahí, el telescopio es tuyo para divisar estrellas, constelaciones y planetas desde el jardín o desde las burbujas, que posibilitan una visión de 360 grados hacia el firmamento.
La cúpula transparente permite la simulación de un planetario a cielo abierto bajo la cúpula estelar. Los equipos son de alta precisión y, en contra de lo que podemos pensar, no importa que haya nubes en el cielo. Los expertos dicen que una capa nubosa proporciona excelentes condiciones de observación.
Y otra curiosidad, es que el mejor momento para ponerse al lío no es en plena noche si no en las primeras horas del día. Al parecer, los objetos se ven mejor a medida que cruzan el meridiano, que es la línea imaginaria que va de norte a sur del cenit porque alcanzan su máxima altura en el cielo. De este modo se reducen los efectos atmosféricos adversos.